Reseña: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas de Laura Norton


Título: No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas
Autor: Laura Norton
Editorial: Espasa
Páginas: 352
Precio:  19,90 euros
Género: Comedia, Romance
ISBN: 9788467041583

SINOPSIS


Si estás leyendo estas líneas  es que te ha llamado la atención el título.¿Te gustaría decírselo a alguien?¿Serías capaz de decírtelo a ti mismo?Y lo más importante: ¿te gustaría mantener durante un buen rato la sonrisa que se te ha quedado en la cara? Pues esta es tu novela.Te podríamos contar con más o menos gracia de qué va la cosa, para que te hicieras una idea: que si la protagonista, Sara, es muy maja, que si tiene un trabajo muy interesante (es plumista, ¿a que nunca lo habías oído?), que si es un pelín obsesiva y alérgica a los sobresaltos... Por supuesto, la vida se le complica y se encuentra con que su piso se convierte en una especie de camarote de los hermanos Marx cuando en la misma semana se meten a vivir con ella su padre deprimido, su hermana rebelde y su excéntrico prometido y, sobre todo, el novio al que lleva mucho tiempo sin ver... Pero mejor no te lo contamos porque te gustará leerlo. Lo único que necesitas saber es que, desde el título, te garantizamos unas cuantas horas de descacharrante diversión como hacía tiempo que no disfrutabas.


OPINIÓN


Voy a empezar hablando muy claro: nunca me han gustado los libros de comedia. No me gustan las comedias por una sencilla razón, y os la explicaré ahora: por las situaciones de bochorno que suceden en estas. No sé si me entendéis, pero todo protagonista de una novela de comedia siempre, SIEMPRE sufre situaciones de bochorno, y yo odio esas situaciones. Me meto demasiado en la historia y siento que las estoy viviendo yo, y de tan mal que lo paso, tengo que dejar el libro aparte y seguirlo más tarde para que se me pase el mal trago. Qué queréis que le haga, no sé si soy la única, pero eso es lo que me pasa.

Y ahora os contaré lo que hice con esta novela: reírme. Sí, sí. Me sorprendió mucho que no hubiera situaciones bochornosas exceptuando una o dos (y en una de ellas lo pasé fatal, eh). Os daré una pista para quienes hayáis leído el libro: Video llamada a distancia con el novio, y aparición del padre. Creo que es suficiente para situarse, y que quien la leyera, se dará cuenta: «¡Ahhhh...! Eso... Uff, sí, sí que fue una situación horrorosa».

Pero bueno, vengo a hablaros de lo que me pareció esta novela, y no a daros pistas sobre nada. Empecemos entonces, con la reseña de verdad:

Sara Escribano estuvo enamorada de Aaron a los diecisiete años, que era un chico guapísimo con el que apenas había tenido contacto. Decidió meterse en el teatro de su colegio para acercarse más a él y gracias a su abuela que era plumista, confeccionó los vestuarios de la obra, cosa por la que Aaron se quedó maravillado y le dijo que continuara por ese camino. Sin emabrgo, en aquel entonces, no hubo nada entre Sara y Aaron. Años después, cuando Sara ya es casi treinteañera, le suplica a su padre que le deje vivir en casa de su difunta abuela y que ella trabaje en su taller y en su tienda como plumista, aunque el trabajo no le va muy bien. Sin el apoyo de su novio, no podría haber continuado. El resultado es que su novio se va a París un año, y cuando va a volver una semana por unas vacaciones, días antes de esto, suceden millares de cosas que hacen que la vida de Sara se complique, entre ellas, Aaron, siendo el novio de su hermana veinteañera, sus padres, que la madre es infiel y quieren separarse, y más, ¡mucho más!
That´s bad karma.
—Que mal karma ni que mal karma, yo, que soy gilipollas, que tenia que haber leído el cartelito de que había una cabra. Pero es lo que me pasa siempre, que soy gilipollas.
Un punto importante que me sorprendió de este libro fue la narración. Tiene partes introspectivas en las que la protagonista, Sara, se hace unos líos mentales tremendos que están descritos de una manera que se puede entender. Parece que Laura Norton conoce la mente de las personas y la asociación que hace con las cosas, porque empieza hablando de que si este chaval hizo no se qué, y asociando cosas, la protagonista, Sara, acaba pensando que esa persona puede ser un asesino (este es un ejemplo, no aparece nada así en el libro).

Luego también hay partes de diálogos que se caracterizan por ser todo diálogo y apenas una descripción. Están todo el rato hablando hasta que se termina la conversación y luego Sara pasa a explicarnos sobre el tema o pasa a pensar sobre otra cosa, dependiendo de la situación.

Aunque parezca algo difícil de leer según me he explicado, que creo que ha sido fatal —lo siento, lo siento, pero no sé explicarlo mejor—, este tipo de narración engancha una barbaridad. Pero muchísimo, creedme, es muy fluido aunque a veces te puedes cansar de las rayadas mentales de la protagonista y saltarte un parrafón en el que solo suelta cosas sobre lo insegura que está sobre algo, o lo feliz que está sobre otra cosa. Dentro de la narración, creo que es en lo único que falla: que suelta unos parrafones de la leche que te pueden llegar a cansar.
—Mejor quemarse que volar a saltitos, ¿no? ¿Dónde está la épica en un vuelo raso?
Respecto a los personajes, también me han gustado mucho, unos más que otros. Hubo uno que odié con toda mi alma, pero no sé si es porque la autora intentó que nos cayese mal a propósito. La madre de Sara se me hizo la cosa más hipócrita del mundo, ve que su marido lo está pasando mal y a ella le da igual, y para colmo piensa que sus hijas le mienten cuando ella es la más mentirosa de todos, y cuidado que ella aquí es la víctima después de ponerle los cuernos a su marido.

Bueno, una liada total. Los problemas que atraviesa Sara son cada uno más complicado que el anterior, y a veces hasta yo me vi sin solución posible, pero Laura Norton se sacaba un as bajo la manga y hacía que todo acabara bien para volver a hundirnos en la mierda de nuevo y volver a empezar con los problemas.

Sara me ha gustado mucho aunque a veces se volviera loca ella sola y se pudiera en lo peor. Me compadezco por ella por lo que tuvo que pasar y todas las putadas que le hicieron. No me extraña que la mujer sea así de desconfiada, la verdad, porque a veces le costaba enterarse de que algo lo hacían porque de verdad les interesaba que ella lo hiciera y no porque les diera pena. Y bueno, lo de Roberto —su novio— y lo que le hizo no tiene nombre, yo es que sí que le daba un guantazo chino a ese hombre, aunque luego se comportara. 
—A lo mejor…un día te compongo una canción.
—¿A mí?
—Si, a la chica que sabia hacer magia con las plumas pero prefirió la química.
En general: que es un libro completamente recomendable, que te vas a divertir mucho por los diálogos tan entretenidos que tiene, por las locuras de Sara y todos los problemas que tiene que pasar. Que es una locura de historia pero muy bien construida, y que aunque no haya una evolución muy grande en los personajes, yo vi que Sara, de como era al principio a como fue al final —que por cierto, un final muy bonito que me encantó— cambió bastante y para bien, que se hizo más fuerte aunque tenga sus bajones.

Que ya, que os lo compréis, que es muy bueno, leches.

Lo mejor: La narración y las situaciones divertidas, los diálogos y todos los problemas y la forma de solucionarlos que hay en la historia.

Lo peor: Las situaciones super bochornosas, que me da igual que den un poco de vergüenza pero con una en especial se pasó de tuerca y no me gustó nada, que lo pasé muy mal. Ah, y que a veces la prota (y su madre) me ponían de los nervios. Aunque en general la historia está diseñada para ponerte de los nervios.

PUNTUACIÓN

4,5/5

3 comentarios:

  1. ¡Hola! Me han recomendado mucho esta novela y con tu reseña me han aumentado las ganas de leerlo.
    Me alegro mucho de que lo hayas disfrutado.
    Nos leemos :)

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  2. Creo que en comparación a tu reseña yo fui demasiado mala y crítica con Laura Norton. Es verdad que tiene momento buenísimos pero la verdad es que leer novelas de comedia es entrar en un mundo donde el humor puede ser muy bueno o muy basto. Yo le di dos estrellitas de nada porque haciendo un balance general de lo que me había parecido la novela llegué a la conclusión de que Norton quiso reflejar esos momentos de bochorno como algo gracioso y acababan siendo problemas que pensándolo bien y, si llegasen a hacerse realidad, los personajes habrían tenido muchos más problemas de los que salen en el libro.
    La ambientación de la historia está conseguida, de hecho lo que más me gustó del libro fue el oficio al que se dedicaba Sara, pero también es cierto que odié mucho a la madre de Berta también (como tú).
    No sé si coincidimos pero me encantó el personaje de David tan alocado, y los diálogos internos entre Sara e Inma. El punto fuerte del libro, para mi gusto, fueron los diálogos; si hubiera sido más narración me habría acabado aburriendo.
    Como tragicomedia se vería una representación de 10.
    ¡Muchos besos guapa! Que tengas un gran sábado ;)

    Etérea

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  3. Buena reseña!!! Creo q me has convencido x q lo lea!! ;)

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